La violencia en Sinaloa escaló a un nuevo nivel. La tarde de este martes, dos escoltas de la Policía Estatal, asignados a la seguridad de la hija del gobernador Rubén Rocha Moya, fueron atacados a balazos mientras viajaban en una camioneta Jeep Cherokee blanca. El ataque tuvo lugar en el canal 7, al sur de Culiacán.
Durante el atentado, uno de los agentes, identificado como José, sufrió heridas graves y fue trasladado de inmediato a un hospital. Su estado de salud se reporta como crítico. El incidente ocurrió en un momento de alta tensión, coincidiendo con la visita del secretario de Seguridad federal, Omar García Harfuch, lo que podría interpretarse como un claro desafío a las autoridades.
Aún se desconoce si el ataque fue dirigido específicamente contra los escoltas o si fue un hecho fortuito. Sin embargo, el suceso subraya el clima de inseguridad que prevalece en la región, donde los atentados contra agentes de seguridad se han vuelto más frecuentes.
Este ataque se suma a una serie de agresiones recientes. El 12 de septiembre, otro escolta del gobernador, Luis Fernando, de 33 años, fue asesinado junto a otra persona en la colonia Agrarista Mexicana.
La situación ha generado una profunda preocupación en Culiacán. Los ataques directos contra policías y escoltas se han intensificado, reflejando la compleja y peligrosa realidad que enfrenta la seguridad en la entidad.