Hoy se somete a escrutinio público la forma en que Gobierno Estatal y municipios aplican y usan los recursos de todos los sonorenses, y la verdad es que la calificación no es para nada buena, señaló el coordinador de los diputados de Acción Nacional, Gildardo Real Ramírez.
Por un lado un gobierno estatal con cuentas llenas de errores pero con protección del Instituto Superior de Auditoría y Fiscalización y por el otro lado, tenemos ayuntamientos con una actuación lamentable y cuentas más que reprobadas.
El gobierno estatal está obligado por la ley a generar “balances presupuestarios SOSTENIBLES”. Sólo en 2019, este gobierno generó un déficit de mil 400 millones de pesos. Le creó a los sonorenses una deuda de mil 400 millones de pesos. Si vemos el acumulado desde 2016, esta administración ha operado con déficit de 3 mil 100 mdp.
8 mil mdp de ingresos excedentes que la Ley indica deben utilizarse en un 50% para la amortización de Deuda Pública y eso no se hizo así. De hecho, la administración estatal contrató deuda de corto plazo por un total de 2 mil 800 mdp cuando el total autorizado por este Congreso fue de 2 Mil 600 mdp. Esto es 250 mdp de deuda de corto plazo no autorizada.
No sólo no combatieron al crimen sino que le abrieron el estado a la violencia. No invirtieron en obra pública sino que lograron convertirse en el gobierno que menos invierte. Hoy se invierte sólo el 2.5% del presupuesto estatal en obra pública cuando en las dos administraciones pasadas se invirtió más del 12% en obra.
No sólo no invirtieron en promoción económica y en la generación de empleo. Estamos en los niveles de crecimiento más pequeños en los últimos 30 años y no hay un plan claro para reactivar la economía.
Mientras el Estado se sume en la violencia y el abandono, este gobierno gastó, por ejemplo, 195% más de lo presupuestado en Asesores, 274% más en servicios generales y 206% más en comunicación y publicidad.
El auditor es otro asunto. EL ISAF es un supuesto vigilante que en realidad juega con la camiseta de la gobernadora.
Hablemos ahora de los municipios de Sonora.
Estas cuentas públicas pintan de cuerpo completo a los alcaldes de Morena que han hecho gala de corrupción, ineptitud y absoluta irresponsabilidad.
Tenemos una camada de alcaldes que dan vergüenza y que están poniendo en riesgo el patrimonio, la seguridad y la vida de los ciudadanos de Sonora.
Ejemplos hay muchos como: Hermosillo y Nogales que dejaron de cobrar impuestos de máquinas y equipos de sorteo, en el primero casi menos de la mitad de lo que corresponde y en el segundo cobro igual. Hermosillo y Nogales decidieron exentar de impuestos a los casineros.
En Guaymas gastos sin justificar, compras de bienes a sobreprecio, arrendamiento de vehículos a sobreprecio. Empalme que cobra mal sus impuestos, usa avalúos viejos para cobrar el traslado de dominio y a veces ni siquiera crea la documentación necesaria para estos movimientos.
Según las cuentas públicas, 32 de los 72 municipios gastaron más de lo permitido en servicios personales y 36 de los 72 gastaron de más en materiales y asuntos superfluos de lo que contemplaba su presupuesto.
No es de extrañarse que la ciudad de Navojoa se está despedazando y a punto de la quiebra o que Cajeme esté sumido en la peor crisis de seguridad que se ha visto en la historia ni que Nogales o Agua Prieta sean un verdadero ejemplo de corrupción en el país.
“Los alcaldes de Morena no sólo están reprobados en sus cuentas públicas sino que deberían estar fuera de esos puestos y muchos de ellos deberían de estar en la cárcel”.
Estas cuentas públicas cuentan una historia que los diputados de Acción Nacional hemos venido señalando desde el inicio y por eso son más que relevantes. Hacemos un llamado urgente a mejorar las leyes para meter en cintura al gobierno estatal y detener la fiesta de transferencias entre partidas presupuestales a amarrarles las manos a los alcaldes y detener el desfalco al que están sometiendo a los municipios de Sonora.