Enfocado en el cabildeo para ser el próximo titular de la Sedena, el general Gustavo Vallejo, a cargo de las obras del Tren Maya, quiere darle un contrato de 1300 millones de pesos la empresa Gas Azul de Nogales, que debería encargarse del suministro de combustibles.
Según dicen fuentes del sector a LPO, la empresa no es conocida ni tiene referencia alguna y tampoco tiene página web. El domicilio está en una casa particular en Etchojoa, al sur de Sonora. No tiene ninguna oficina en el sureste. El exterior de la vivienda está descuidado y no hay el menor indicio de que sea una empresa capaz de abastecer 55 millones de litros de diésel, que es lo que dice el contrato que recibirá.
Gas Azul estaría vinculada a Bernardo Gil Torruco, funcionario del ISSSTE durante el sexenio de Ernesto Zedillo y encarcelado en el gobierno de Vicente Fox por presuntas irregularidades, aunque luego quedó en libertad por pagar una fianza.
Gil Torruco fue Oficial Mayor en los gobiernos de la CDMX del PRD que estuvieron a cargo de Cuauhtémoc Cárdenas y Rosario Robles. En el sexenio de Enrique Pela Nieto, Robles, lo ubicó en la aduana de Tampico.
En la Sedena susurran que Bernardo Gil se encargó, por medio del General Vallejo, de poner fin al contrato de suministro de diésel de Secarsa Combustibles. Una empresa que ganó su contrato de manera legal, participando en una licitación pública.