Ciudad de México. – La magistrada Janine Otálora Malassis ha notificado al Senado de la República su irrevocable decisión de concluir su periodo de nueve años en la Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) el próximo 31 de octubre, rechazando de manera explícita la ampliación de cargo aprobada recientemente en la polémica reforma judicial.
La determinación de la magistrada ha resonado en el debate público y las redes sociales como un acto de defensa de la legalidad y la independencia judicial, en un contexto de intensa crítica sobre la presunta “captura” de los órganos jurisdiccionales. Otálora, una de las voces que se había opuesto a la mayoría en recientes fallos controvertidos del TEPJF, prioriza el periodo original por el que fue electa en 2016.
“Ha sido para mí un honor desempeñar el cargo de magistrada en el órgano de justicia constitucional electoral de última instancia. Agradezco la confianza que fue depositada en mi persona por el Pleno del Senado”, expresó en sus redes, en un mensaje que algunos interpretan como una velada crítica a los intentos por prolongar o modificar los periodos de cargos clave.
Con su partida, el Pleno del TEPJF volverá a quedar incompleto con solo seis de siete integrantes, justo en la antesala del próximo proceso electoral, lo que intensifica la presión sobre el Senado para nombrar a su sucesor y asegurar la estabilidad en la máxima instancia de justicia electoral del país. La decisión de Otálora se suma a la narrativa de resistencia dentro del Poder Judicial ante las reformas impulsadas desde el Ejecutivo.


