El subsecretario de Prevención de la Salud, Hugo López-Gatell, confirmó hoy que no existe evidencia documental localizada hasta el momento de que el dinero decomisado al sinomexicano y operador financiero delincuencial, Zhenli Ye Gon, haya sido utilizado para la construcción de los Centros Nueva Vida.
Lo anterior, luego de que hace un año el presidente Andrés Manuel López Obrador pusiera en duda el destino de aquel decomiso, y que el expresidente Felipe Calderón reiterara a través de su cuenta de Twitter que dichos centros fueron el destino de los recursos.
En la edición más reciente del semanario Proceso, bajo la firma del reportero Rodolfo Montes, se acredita a través de solicitudes de información que la secretaría de Salud, no cuenta con evidencia documental sobre el uso de dichos recursos.
Cuestionado al respecto, durante la conferencia de prensa matutina de hoy, el presidente López Obrador derivó el tema al subsecretario de Salud, Hugo López-Gatell, quien dijo tener conocimiento de que, en el sexenio de Felipe Calderón se rehabilitaron o remodelaron algunos centros de salud para destinarlos a los mencionados centros de rehabilitación de adicciones.
Ese conocimiento, planteado por López-Gatell como “información circunstancial”, remitió a Carlos Rodríguez Ajenjo y su desempeño como titular del entonces Consejo Nacional contra las Adicciones, destacando su integridad y profesionalismo.
Sin embargo, expuso, la parte administrativa no le correspondió al médico y hasta ahora, se sigue buscando en la dependencia la evidencia de los contratos de remodelación, autorización de permisos de construcción y otros documentos.
“No es, desafortunadamente, el único caso en el que hemos buscado evidencias documentales y no se encuentran en archivos”, dijo el subsecretario.
El dinero de Shenli Ye Gon
En 2007, un operativo presuntamente derivado de un decomiso de psudoefedrina en el puerto de Lázaro Cárdenas Michoacán, llevó a las autoridades a un cateo en una propiedad de las Lomas de Chapultepec. Ahí, habrían localizado poco más de 205 millones de dólares estadunidenses que, junto con otras monedas y joyas, sumaban alrededor de 250 millones de dólares americanos.
El caso cobró notoriedad porque en sus declaraciones, Shenli Ye Gon, el financiero sinomexicano detenido en relación a esos recursos, habría acusado a Javier Lozano Alarcón de extorsión popularizando la frase “copelas o cuello”.
El dinero fue absorbido por el gobierno de la República en medio de un procedimiento poco ortodoxo; según el gobierno calderonista, fue destinado la construcción de Centros Nueva Vida pero desde entonces y hasta ahora, no hay evidencia documental de la inversión.