Aquí el testimonio de Yaya Martinez, una emprendedora de esta ciudad fronteriza que cuenta lo que le sucede…
Yo soy la hija de un matrimonio separado con una mamá “la luchona 4×4” y de un papá “el kks” que no le dio pensión.
Soy la hija que debe dar pensión al papá imposibilitado que no mira desde los 6 años.
Cuando lo conté por primera vez a mis allegados, todos se asombraron y dijeron: “¿qué, es posible eso? Y si, por ley es posible que los hijos adultos mantengan al papá que no puede trabajar, los haya mantenido o no, se haya hecho cargo de ellos o no.
Al principio si te da corajito, lloras y echas &$!#% porque dices: “lo que soy ahora se lo debo a quien me crío y me cuidó” obvio todo a mi mamá; y al que solo supo traerme a la vida y se evitó responsabilidades tal cual cobarde, dices: “pues que Dios lo cuide” y para terminar cuidándolo (manteniéndolo uno). La historia está muy bizarra y por si fuera poco, tengo mucho más que contarte sobre el trasfondo y el proceso de mi papelito más adelante.
Pero por ahora si me lo permites termino este post recordándote esto:
- No lo pienses tanto y haz valer los derechos de tu hijo antes que sea bien tarde. Tu eres su voz hoy que él es pequeño ¡Si, tu, mamá luchona 4×4 que aún no a pedido pensión para su hijo! ¡Hazlo ya! No dejes pasar el tiempo por evitarte confrontaciones, y decirte a ti misma “no lo necesitamos”. Solo evítale ese trance y atropello a tu futuro hijo en edad adulta. Porfavor no permitas que a tu hijo le pase lo que a mi.