Los términos tarahumara y rarámuri son comúnmente usados en Chihuahua, Durango y Sonora para nombrar a los indígenas que viven en la Sierra Madre Occidental.
Gracias a la creciente conciencia social de las nuevas generaciones y el interés de los jóvenes en conocer más sobre sus orígenes, se ha hecho evidente la necesidad de reconocer a los pueblos originarios y sus bastas aportaciones socio-culturales y, con ello respetar sus usos y tradiciones; es aquí donde yace el dilema, ¿qué término es más apropiado; rarámuri o tarahumara?.
El hecho de que la “historia la escriban los ganadores”, ha provocado diferencias ideológicas y culturales, luego de que el “conquistador” trata de imponer no solo su versión de los hechos, sino también su ideología, idioma y religión.
Chihuahua es un claro ejemplo de cómo esta imposición de ideologías afecta directamente a la sociedad e, incluso, como quizás pretendieron los colonos, desvanecen la historia e identidad de los pueblos originarios.
El termino tarahumara, es comúnmente usado en Durango, Chihuahua y Sonora para llamar a cierto grupo de indígenas que viven en la Sierra Madre Occidental, no obstante, como bien es sabido, esta zona es habitada por al menos cuatro diferentes etnias; pimas, guarojíes, tepehuanes y rarámuris.
La gente de los “pies ligeros”
Es a estos últimos a quienes en especial se les ha denominado tarahumaras, por una supuesta castellanización del vocablo original, sin embargo, no existe un registro antropológico, lingüístico o social que explique de manera fidedigna el por qué comenzó a usarse este término, el cual resulta demasiado vago en términos generales.
La palabra rarámuri, como se autodenomina este pueblo, proviene de los vocablos rara (pie) y muri (correr); corredores a pie, aunque tradicionalmente también se ha aceptado la definición pies ligeros, lo que hace alusión a las grandes distancias que son capaces de recorrer a pie. Al ser ellos mismos quienes se denominan así, esta sería la forma correcta de hacerlo.
De esta definición se desprende una nueva problemática, pues existe un debate abierto en torno a la pronunciación correcta de esta palabra, que se resume básicamente en dos opciones ralámuli y rarámuri.
En torno a esta cuestión, la respuesta es más clara, pues según explica el lingüista Edgar Adrián Moreno, la confusión se debe a un fonema o sonido que no existe en la lengua castellana, el cual es representado el Alfabeto Fonético Internacional por este símbolo: (?), que puede parecer una “r”, pero no es así.